Anidado, entre sacos de arpillera, me mantengo en un duermevela embalado por el traqueteo de las ruedas de madera e hierro. De vez en cuando me agito con un tropezón. Abro los ojos. Un punto de luz, blanca y cegadora, tiñe el cielo de un amarillo brillante que pasa a naranja en nubes que cambian de color como las llamas de una hoguera. La mañana fría no invita al movimiento y me acurruco más para mantener el calor. El conductor dicta órdenes al burro. Este, como si lo entendiese, contesta con un rebuzno. Por las grietas del carro percibo verdes salpicados, aquí y allá, de manchas rojas. Los rayos de sol persiguen la carroza ganando espacio y rozan ya las puntas de los sacos. El ruido sube de tono cuando nos juntamos, en caravana, a otros carros a la vez que los conductores se saludan con alegría. Froto los ojos, somnoliento. Surgen montañas que se mueven con distintas cadencias, como si la tierra fuera sacudida por un tremendo seísmo. Salto de mi escondrijo y corro sobre los fardos intentando no perder el equilibrio. Asomo la nariz y casi me doy con una masa castaña que se aleja con rapidez. En la distancia, comienza a tomar forma, distinguiendo la cesta de mimbre que un trabajador carga en su hombro. Diviso otros, que se meten entre las vides, bajando la cuesta. Allí abajo indiferente a todo el Duero azul sigue su curso. Empezó la vendimia.

Nivel de dificultad:
Muy fácil
Tiempo de elaboración:
20 min

4 personas

Ingredientes:

300g de champiñones Portobello

2 c/s de aceite de oliva

1 pizca de sal

180ml de Oporto

Preparación:

Separe los tallos de los champiñones. Coloque  los sombreros, con la base para arriba, en una sartén untada con aceite. Espolvoree con un poco de sal gorda. Tape y deje sudar entre cinco y diez minutos. Añada el Oporto y deje reducir cinco minutos.  

Sirva caliente, acompañado con unas buenas rebanadas de pan.

Esta receta admite variantes, por ejemplo con setas shiitaki y un pimiento rojo, cortadas a tiras. Pele dos o tres dientes de ajo, corte en trocitos gordos, y saltee junto con el pimiento en el aceite. Cuando empieza a reblandecer añada las setas y un poco de sal. Tape y espere cinco minutos antes de juntar el Oporto. Deje que reduzca ligeramente.

Clavos de metal y plástico azul y rojo, volaban alternadamente, seguidos de gritos de alegría cuando se clavaban en la arena blanda, o rápidamente retirados si caían de lado, terminando por tumbarse. Voces de niños y mayores eran atenuadas por el sonido de las olas que reventaban  en la arena. Olas que arrastraban  enormes algas de colores que iban del verde transparente al marrón. En la arena mojada cangrejos caminaban buscando refugio entre  las rocas. Debajo  del toldo a rayas, azul y blanco una madre, sentada en un cojín, apartaba la mirada de la revista y miraba a los niños, que jugaban con cubos, moldes y palas de plástico.

Abrió la bolsa y se cercioró de que había traído el almuerzo. Un grito hiso que mirara otra vez y no vio al pequeño con su hermano. Con el agua por las rodillas este miraba la mar, viendo como las olas arrastraban su cubo azul con relieves blancos. Corrió hacía él y le tocó en el hombro para que se quedara quieto. Se metió en el agua y dio  unas brazadas intentando alcanzarlo, pero pronto abandonó. Volvió con el niño y se quedaron mirando, como se alejaba flotando, llevado por las olas. De pronto, sin que supieran como, apareció un hombre que nadaba con energía. En cuestión de segundos había pasado la mano por el asa y nadaba de vuelta a la orilla. El niño avergonzado, cogió el cubo cuando este se lo dio y volvió con su madre al toldo, donde su hermano daba mordiscos a una empanada de atún.

Nivel de dificultad:

Muy fácil

Tiempo de elaboración:

60 min

6 personas

Ingredientes:

300g atún (escurrido)

2 cebollas medias

4 dientes de ajo

1 pimiento rojo

2 c/s de aceite de oliva

280g de tomate frito

Sal

Pimienta

1 guindilla

2 placas de masa quebrada

1 huevo para untar

Preparación:

Pique la cebolla y el ajo.  Coloque en una olla con el aceite y lleve a fuego medio/ bajo. Coloque la tapadera y deje sudar. Corte el pimiento en pedazos pequeños y añada a la cebolla y el ajo removiendo para que no se queme. Escurra el aceite y mezcle con los demás ingredientes. Por ultimo  añada el tomate frito, sazone con sal y pimienta y una guindilla. Cubra el fondo de un molde con una lámina de masa quebrada. Coloque el relleno y cubra con otra lámina. Doble las puntas para cerrar la empanada y  pinte con huevo batido. Haga pequeños cortes en la superficie con un cuchillo, para que salga el vapor. Hornee entre veinte a treinta minutos o hasta que la empanada tenga un color dorado. Decore con tomates cherry. Sirva fría acompañada de ensalada.

La madera emitió un sonido seco cada vez que el cuchillo de porcelana la tocaba  y la cebolla caía como si fueran piezas de un lego. Champiñones, pimientos de varios colores, guindillas, manzanas y perejil aguardaban en la encimera. Si no hubiera llamado cuando me parara en el supermercado tendría la excusa perfecta. Agobiado porque no iba a tener tiempo de revisar el texto, intentaba  acordarse de las frases que no terminara de memorizar. Por si fuera poco ahora tendría que improvisar! En una visita rápida  a la sección  de frutas y verduras había cogido los que le pareció, pero no dejaba de pensar que iba a competir con gente que lo hacía mejor. No, no estaba feliz. Tenía que llevar algo al ensayo. Sacudió  la cabeza, cogió una sartén y empujó la cebolla con el cuchillo…

Nivel de dificultad:

Fácil

Tiempo de elaboración:

60 min

Ingredientes:

280g de champiñones laminados

1 pimiento verde

1 pimiento rojo

1 pimiento amarillo

1 cebolla morada, tamaño medio

2 manzanas

1 c/té  de ajo triturado

Sal.

5 c/sopera de azúcar

2 chiles verdes

1 e 1/2 taza de cuscús

1 e 1/2 taza de agua

Aceite de oliva

Preparación:

Corte en cuatro los pimientos verde y rojo e lamine por separado para no mesclar los colores. Parta el pimento amarillo en cubos. Pique la cebolla en cubitos. En una sartén con un poco de aceite saltee los champiñones, (cinco minutos),  y añada una pizca de sal. Retire con una espumadera y reserve. Saltee el pimiento verde en el líquido que los champiñones han soltado y añada un poco de ajo triturado. Remueva de vez cuando y retire del fuego tan pronto empiecen a reblandecer. Repita la operación con el pimiento rojo, sazonando con un poco de sal. Reserve.  Añada tres cucharas de azúcar a la cebolla y deje que se caramelice ligeramente. En cuanto vea que empieza a quedar translucida retire. Por ultimo pele y corte la manzana en cubitos y saltee con dos cucharas soperas de azúcar.

Hidrate el cuscús con agua caliente, (que no llegó a hervir), tape y espere cinco minutos. Riegue con un hilo de aceite y remueva con un tenedor para que se suelte. Corte la guindilla en rodajas finas y mezcle todos los ingredientes con el cuscús. Sirva frio.

Nota: Puede añadir un cubo de caldo de verdura al agua del cuscús. La cantidad de guindilla puede variar según el gusto o el hecho de que sea más o menos picante. Las manzanas pueden ser de cualquier variedad siempre y cuando sean sabrosas.

De los cuadros cuadros de Van Gogh me gusta especialmente la pincelada decidida. Los azules, verdes, rojos amarillos y violetas que me llenan el corazón. Una paleta de colores primarios e secundarios que usó como nadie desafiando a los mas conservadores! Los pigmentos dan paso a los vegetales e las pinceladas a cortes más o menos groseros. Como me había pasado con Van Gogh me dejé llevar por los sentidos y empecé a admirar el pisto andaluz!

Nivel de dificultad:

Muy facil

Tiempo de elaboración:

Más de 60 min

6 personas

Ingredientes:

200ml de aceite de oliva

1 cebolla grande

2 pimientos rojos

4 calabacines

2 berenjenas

300g de setas laminados

560g de tomate frito

Sal

Pimenta

2 c/s de azúcar

Preparación:

Pique la cebolla. Cubra el fondo de una olla grande con aceite, añada la cebolla y tape para que se mantenga el vapor. Deje rehogar a fuego lento removiendo de vez en cuando hasta que estén translucidas. Corte os pimientos en trocitos y añada a la cebolla. Lave los calabacines y corte en cubos. Cuando el pimiento esté cocido escurra con un colador y reserve. Coloque el caldo y los calabacines en la olla y deje que se hagan, siempre a fuego lento. Lave las berenjenas y corte en cubos de cerca de dos cm y reserve. Cuando el calabacin se haya reblandecido y soltado todo el jugo escúrralo y reserve. Cocine las berenjenas en este jugo. Cuando vea que están blandas agregue todos los vegetales y los champiñones. Junte el tomate frito y envuelva con un cucharon. Sazone con sal y pimienta a gusto y añada el azúcar. Si el caldo está demasiado espeso ponga un vaso de agua. Deje que se haga quince minutos más antes de apagar el fuego.

Sirva con huevos escalfados.

Nota: Pode substituir el tomate frito por tomate natural, en ese caso necesita aproximadamente un quilo de tomate maduro. Pélelo y corte en cubitos. Retire las berenjenas, escurra y reserve. Cocine el tomate con el jugo de las verduras. Cuando esté practicamente deshecho junte los vegetales y los champiñones.

Si decide hacer el pisto con tomate fresco el pisto queda más ácido con lo cual necesitará más azúcar.

El secreto de esta receta está en cocinar los vegetales a fuego lento y por separado.

Las vacaciones pasaron volando y volví al trabajo. No tengo mucho tiempo, pero me apetece un plato medio decente después de todo el verano comiendo bocadillos. Miré en la despensa y me encontré con estos noodles de arroz. Junté unos champiñones laminados, pimiento rojo dulce y un poco de piña  fresca  “et violá” una ensalada rápida y reconfortante. ¡Ya apetecía!

Nivel de dificultad:

Muy fácil

Tiempo de elaboración:

30 min.

4 personas

Ingredientes:

1 cebolla mediana

1 pimiento rojo, dulce

300g de champiñones laminados

4 dientes de ajo

200g de noodles de arroz

400g de piña

2 c/s de azúcar moreno

1 guindilla

Aceite de oliva

Sal

Pimienta, (opcional)

Agua.

Preparación:

Coloque los noodles en agua hirviendo y espere tres minutos. Pase por agua fría y escurra.

Pique la cebolla y los ajos. Rehogue la cebolla y la mitad de los ajos con un poco de aceite. Añada el pimiento, cortado en tiras, y remueva de vez en cuando. En cuanto empiece a reblandecer retire del fuego y reserve.

En otra sartén coloque un poco de aceite y el resto de los ajos, cuando empiecen a dorarse añada la guindilla picada y los champiñones. Sazone con un poco de sal y cocine cinco minutos.

Coloque el azúcar en una sartén, caliente a fuego lento y cuando empiece a derretirse añada la piña cortada en trocitos. Espere tres minutos antes de darle la vuelta.

Coloque en tazas y sirva.